No hay tu tía.
No me sale.
Comparable a cuando chaval
las ecuaciones de segundo grado.
Demasiadas matemáticas para mis 10 dedos.
Porque yo, cuando te pienso,
cuando pienso en tus calenturas,
no pienso en sexo.
Eso del sexo,
te confieso mi impotencia,
me huele a platito cuadrado decorado con dos boquerones,
un cuarto de pichón,
perejil cual ficus de vestíbulo,
¿a qué tanta tristeza?,
y un chorreón de tortilla de patatas licuada
en torno a una parrafada liosa y gabacha.
Un potingue
que no te curará el hambre.
Un follar de polla y tenedor.
No rebañado con las manos.
Porque yo, cuando te pienso,
cuando pienso en tus
me piensan las manos.
.
3 Comentario:
Un poema brillante y repleto de manos.
Abrz.
más que un menú es un bufé libre. Muy bueno. Me gusta la foto. Un abrazo
qué manera de follar, antero, qué manera!
Publicar un comentario